Aº Leyes: la testigo clave desnudó las cajas de la cúpula policial

En la segunda jornada del juicio por el vehículo con 2 toneladas de droga hallado en Arroyo Leyes, la ex jefa de la comisaría de Rincón, Stella Maris Olivera relató discusiones y vivencias con sus superiores de entonces por la recaudación clandestina. 

Este mediodía arribó a la sede del Tribunal Oral Federal de Santa Fe Stella Maris Olivera, titular de la comisaría de Rincón al 2 de noviembre de 2014, el día que se produjo un confuso episodio con un camión cargado de marihuana en Arroyo Leyes. 

Según relató la testigo clave, cuando llegó al lugar del hecho se encontró con dos detenidos. Uno de ellos era un policía, el “Aguja” Agüero (ahora imputado en la causa). El jefe de Zona Martín Díaz, allí presente, la mandó a buscar testigos. Al volver, aquéllas dos personas ya no estaban. 

Fuertes dichos
El momento más álgido de la declaración de Olivera fue cuando se refirió a la recaudación ilegal por parte de autoridades policiales. 

La actual integrante de la PDI dijo que mantuvo una discusión con el entonces titular de Orden Público (Cristian Hang, también imputado) en la que le recrimina que le pida explicaciones por lo sucedido con el camión a ella, y no a sus superiores. “Ustedes saben cómo es la situación: los jefes siempre recaudan para otros jefes”, le dijo. 

En otra ocasión –siempre según su relato-- tuvo una acalorada charla con el ex jefe de la Unidad Regional I, Sergio Vergara, en la que éste le blanqueó: “Hay cuestiones consensuadas. Automotores, prostitución. Las drogas sabías que no”. 

Además, en un tramo de su declaración, la mujer hizo un descargo que conmocionó a todos los presentes: “A mí me pueden tildar de inoperante, pero nunca me van a  tildar ni de recaudadora ni de delincuente, como lo hizo en su momento mi ex jefe el comisario Hang. Él me dijo que yo era una triste comisario que nunca iba a llegar a ningún lado. Sí, no voy a llegar a ningún lado ni a ocupar un lugar en la jefatura si esto implica recaudar. No voy a llegar a ningún lado porque yo soy una persona que vive con lo poco que tengo, que trabajo, que vivo en un Fonavi. Y aunque sea una crota no caigo en esto de seguir recaudando para los jefes. Yo no necesito llevarme (plata) ni de la droga, ni del choreo de las motos ni de la prostitución”.