Violento asalto a un negocio de Avenida Luján al 3300
Un delincuente simuló ser un cliente, hasta que sacó un arma con la que apuntó y amenazó durante algunos minutos a las dos mujeres que atendían. Ocurrió este martes a la tarde.
Por: santotoméaldía /
Un nuevo hecho de inseguridad ocurrió este jueves en Avenida Luján al 3300. Esta vez el blanco fue una galletitería ubicada sobre la mano este, en la intersección de la avenida con calle Arenales. Allí, un delincuente armado robó dinero en efectivo luego de amenazar a las dos mujeres que atienden el comercio.
Cabe recordar que el día anterior una casa particular de Luján al 3300 -justo enfrente del negocio- sufrió un llamativo hecho de robo, en el que uno de los ladrones fue atrapado gracias a que llevaba una máscara del hombre araña.
Asalto a mano armada
Según detalló este viernes a santotomealdia Isel, la propietaria de la galletitería Chocolate, el robo ocurrió ayer a las seis menos cuarto de la tarde. "Había mucha gente en la calle, esperando el colectivo", contó. Y reveló que, en un primer momento, el delincuente fingió ser cliente: "Entró a cara descubierta, muy bien arreglado y tenía una mochila".
Después de preguntar por "unas cajas para pizza", el hombre salió del local. "Supongo que porque había gente. Esperó que no quede nadie y volvió".
De un momento a otro, "sacó el arma y nos apuntó" (a la propietaria y a una empleada). "Nos gritaba, con insultos y nos pedía la plata; después nos pedía que nos tiremos al piso", relató una de las víctimas del violento episodio.
"Nos gritaba, con insultos y nos pedía la plata; después nos pedía que nos tiremos al piso", relató una de las víctimas.
Justo en ese momento, dos adolescentes ingresaron al local. "Eran dos chicas de unos 15 años; él se dio vuelta y les apuntó, después se dio vuelta para seguir apuntándonos a nosotros y las chicas salieron corriendo", contó Isel.
Cuando las menores se fueron del negocio, el ladrón entendió que podrían dar aviso a la policía. "Nos seguía insultando y pidiendo plata. Ya le habíamos dado", agregó la mujer.
Después de unos minutos el sujeto se fue caminando hacia el este y no se supo nada más de él.
La mujer dio aviso a la policía y la denuncia del el hecho fue radicada en la Subcomisaría 9na. "El problema no es la policía; al que robó ayer acá enfrente lo agarraron y ya lo largaron; y vino a la casa a amenazarlos preguntando porqué lo habían denunciado", finalizó la mujer.
