En primera persona: el testimonio de dos santotomesinas en Florida, a la espera del huracán Dorian

Cuando organizaron su viaje a Estados Unidos, Romina Goizueta y Lilia Trapani no imaginaron que a sus días en New Smyrna -en la costa noreste de Florida- los pasarían encerradas, en una casa amurallada y con incertidumbre por la llegada de un huracán.

Aunque tienen alma de aventureras, las dos santotomesinas que hoy cuentan a santotomealia cómo vive esa parte del mundo  las horas previas a la llegada de Dorian, seguramente hubiesen preferido que nada sucediera. De hecho, para el día de hoy (lunes) tenían boletos para viajar en un crucero a las Bahamas, algo que no pudieron hacer.

Desde hace varios días, las autoridades de EEUU monitorean al segundo cada avance del monstruoso huracán de categoría 5 hacia la península de Florida. Los datos estadísticos dicen que solo cuatro huracanes de esa categoría golpearon a los Estados Unidos en toda la historia.

De la ilusión a la incertidumbre

Desde la casa en donde se alojan en New Smyrna, Florida, Romina Goizueta relató su experiencia a santotomealdia: “Hace varios meses organizamos con una amiga un viaje de siete días a New York, para luego seguir camino a Florida. La ciudad de los rascacielos fue sorprendente, nos impregnó de arte y grandes espacios, gente diversa y nuevos aromas. Llegar a Florida significó conocer el mundo Disney, los Mall, y la ilusión del Crucero a Bahamas. Ya casi listas para ir a Cabo Cañaveral, se anuncia la proximidad de Dorian. Al principio, se movía rápido, por eso no se barajaba la posibilidad de sellar la casa o evacuar la ciudad”.

“Luego mostró su genio”, contó Romina, refiriéndose al poderoso Dorian. Y continuó: “al moverse lento, empezó a crecer en intensidad. Si bien la población sabe cómo manejarse en estas circunstancias, la angustia lleva a conductas de acopio. Empezó a faltar el agua envasada, el combustible y los alimentos enlatados. Ya estaba la certeza del gran daño que produciría”.

"Si bien la población sabe cómo manejarse en estas circunstancias, la angustia lleva a conductas de acopio. Empezó a faltar el agua envasada, el combustible y los alimentos enlatados".

Para quienes no están al tanto de las últimas noticias sobre Dorian, cabe mencionar que Estados Unidos ordenó la evacuación obligatoria de 1 millón de personas por el monstruoso huracán. Las autoridades tomaron esa decisión por el peligro que supone el ciclón que, en su paso por Bahamas, dejó el saldo de al menos un muerto y 13 mil casas destruidas.

El “sellado” de la casa

Cuando tomaron dimensión de la magnitud del huracán que se avecina, los habitantes de Florida que fueron obligados a evacuar sus viviendas comenzaron a tomar medidas. “En casa del hermano de mi amiga comenzamos el sellado de aberturas, para eso, y es de valorar, la llegada de los amigos, vecinos (cubanos, dominicanos y porteños) hicieron más fácil y rápido el trabajo”, detalló Romina.

“Se comparte todo, a nuestra casa llegó Roger con sus hijos, sobrino y abuelos para alojarse, ya que ellos viven en una casa cerca del mar y las autoridades cierran los puentes. Es obligatorio que abandonen el domicilio”, agregó.

..."esta situación nos mantiene en vilo, ya que la naturaleza es impredecible. Cuando a la mañana nos tranquiliza un recorrido, a la tarde nos angustia otra información”.

Finalmente, Romina Goizueta contó que “la información que se maneja tiene dos fuentes, la americana y la europea con distintas proyecciones, y esta situación nos mantiene en vilo, ya que la naturaleza es impredecible. Cuando a la mañana nos tranquiliza un recorrido, a la tarde nos angustia otra información”.

Así viven sus horas en Estados Unidos Romina  y Lilia. Esperando la llegada de Dorian, atentas a las noticias y con el deseo de que sus días en Florida solo dejen el recuerdo de una aventura más.