La médica trucha santotomesina quedó en libertad tras pagar una fianza

La santotomesina imputada por ejercicio ilegal de la medicina y lesiones leves dolosas recuperó la libertad este viernes, tras un acuerdo entre las partes, en la audiencia para tratar la prisión preventiva que había solicitado el fiscal Alejandro Benitez.

El abogado defensor Ignacio Alfonso Garrone acordó con el fiscal una serie de medidas alternativas para que la imputada transite la causa penal en libertad. La mujer deberá fijar domicilio, someterse a la tutela de un guardador y presentarse a firmar periódicamente a la sede del MPA. Además se le impuso una fianza de 150.000 pesos.

Con matrícula falsa

La investigación se inició a partir de una denuncia radicada el pasado 21 de mayo por el director médico del Samco de La Pelada, donde la imputada había prestado servicios como médica de guardia. Además se había desempeñado en los samcos de Sarmiento, Romang y Laguna Paiva.

El fiscal indicó en audiencia imputativa que “el Colegio de Médicos de la provincia informó que no figura ninguna profesional inscripta con el nombre de la imputada”. En tal sentido, añadió que “la mujer no tenía título habilitante ni autorización para ejercer el arte de curar y utilizaba una matrícula que es de otra profesional de la salud, con la que coincide el nombre de pila”.

“A pesar de no estar autorizada, la mujer realizó diagnósticos clínicos a diversas personas. Asimismo, de acuerdo a la información que surge de los recetarios y planillas que la mujer firmó en los centros de salud, prescribió, administró y recetó medicamentos para la cura de enfermedades a más de 100 pacientes”.

Ejercicio ilegal de la medicina y lesiones leves dolosas

La mujer fue detenida el día martes en una de las clínicas de estética donde trabajaba. Al día siguiente el fiscal Benitez le imputó dos hechos delictivos. Primero relató atenciones realizadas a cientos de pacientes en varias dependencias de salud de la provincia: recetó medicamentos y realizó diagnósticos a las cientas de personas que se presentaron en las guardias de los SAMCOS de La Pelada, Sarmiento, Romang y Laguna Paiva. Este hecho fue calificado como ejercicio ilegal de la medicina.

Luego, el acusador público precisó las lesiones ocasionadas a una joven en uno de los centros de estética en los que trabajaba, a quien le produjo quemaduras de primer grado en un tratamiento facial denominado “pealing”. Este hecho fue imputado como lesiones leves dolosas, en concurso real con el ejercicio ilegal de la medicina.